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COPA DEL REY

El Barsa de Messi, goleó al Real Madrid y puso contra las cuerdas a Solari

Barcelona, del argentino Lionel Messi, se clasificó este miércoles (27/02) a la final de la Copa del Rey 2018/2019 tras ganarle en el partido de semifinal de vuelta al Real Madrid 0-3 con goles convertidos en el segundo tiempo por el uruguayo Luis Suárez, a los 50’ y a los 73’ (Barcelona) y de Raphael Varane, a los 69’ (Barcelona). La caída frente a los ‘blaugrana’ puso en duda la continuidad de Santiago Solari como entrenador del equipo ‘merengue’ aunque aún ganando este título no se aseguraba seguir el año que viene, pero al menos tendría mucho mejor cartel. Solari no sabe que ocurrirá con su futuro. Renovado su contrato hasta 2021 tras ganar sus primeros cuatro partidos, allá por noviembre, el técnico argentino sabe que el puesto de entrenador del Real Madrid se mantiene si hay títulos a final de año. Una temporada en blanco no lo ayuda a seguir en el banco del Santiago Bernabéu. Santiago Solari ya ganó el Mundial de Clubes esta temporada, pero al final de curso el balance se hace con los tres grandes títulos, Liga, Champions y Copa del Rey, especialmente con los dos primeros. En Champions las cosas están bien, con 1-2 a favor en la ida de octavos, pero la competición es muy larga.

En el encuentro disputado en el estadio Santiago Bernabéu, el Barcelona, del argentino Lionel Messi, se clasificó este miércoles (27/02) a la final de la Copa del Rey 2018/2019 tras ganarle en el partido de semifinal de vuelta al Real Madrid 0-3. 

La caída frente a los ‘blaugrana’ puso en duda la continuidad de Santiago Solari como entrenador del equipo ‘merengue’ aunque aún ganando este título no se aseguraba seguir el año que viene, pero al menos tendría mucho mejor cartel. 

Solari no sabe que ocurrirá con su futuro. Renovado su contrato hasta 2021 tras ganar sus primeros cuatro partidos, allá por noviembre, el técnico argentino sabe que el puesto de entrenador del Real Madrid se mantiene si hay títulos a final de año. Una temporada en blanco no lo ayuda a seguir en el banco del Bernabéu.   

Santiago Solari ya ganó el Mundial de Clubes esta temporada, pero al final de curso el balance se hace con los tres grandes títulos, Liga, Champions y Copa del Rey, especialmente con los dos primeros. En Champions las cosas están bien, con 1-2 a favor en la ida de octavos, pero la competición es muy larga. 

En la previa a este duelo, había muchas voces que afirman en el seno del Real Madrid que al argentino le faltaba aún mucho para ser entrenador de gran nivel, que no lee bien los partidos o que tiene muchas cosas que pulir.   

Con la eliminación, Real Madrid quedó tocado porque cayó en su casa ante el eterno rival, y además le queda el duelo de Liga tres días después, además del Ajax tan solo una semana más tarde. Todo en juego en siete días. 

Barcelona defenderá su título de Copa del Rey el próximo 25 de mayo en el estadio Benito Villamarín.

Durante el encuentro, el conjunto dirigido por el argentino Solari perdonó a Barcelona en una de las mejores versiones de la temporada y lo pagó con la eliminación ante un rival que se defendió bien y decantó la semifinal en dos escapadas del francés Ousmane Dembele y en un tiro penal.

Luis Suárez marcó un doblete y el segundo tanto, que lo introdujo en su propio arco el francés Raphael Varane, aunque justo detrás estaba el uruguayo para marcar.

Había merecido mucho más el Real Madrid, pero su negación ante la portería rival, la ausencia de un jugador que 'mate', fue aprovechada de forma milimétrica por Barcelona que superó los momentos de crisis con más o menos fortuna y machacó en el segundo periodo. Ni siquiera necesitó que Lionel Messi protagonizara una de sus exhibiciones.

De entrada hubo miedo, o respeto, demasiado. El conjunto azulgrana apostó por adueñarse del balón y circularlo pero sin riesgos, a ritmo demasiado parsimonioso, tanto que favoreció el éxito del dispositivo defensivo del cuadro blanco, concentrado atrás a la espera de tomar más ventaja en la eliminatoria.

Los errores con el balón de los azulgranas permitieron a los conducidos por Solari vivir con más tranquilidad atrás y dar protagonismo al vértigo del brasileño Vinicius, tan peligroso como ineficaz en el remate.

Como en encuentros precedentes, el joven brasileño disfrutó de un ramillete de importantes ocasiones ante Marc André Ter Stegen, alguna de ellas clamorosa. Otra vez le faltó el acierto en el remate y Real Madrid no pudo dar un golpe de gracia a la semifinal.

Todo lo contrario. Se llegó al descanso con la sensación de que el Real Madrid había perdonado y que para Barcelona lo mejor era el resultado. En la reanudación no le pudo salir mejor el planteamiento a Valverde. Muy pronto, Suárez aprovechó un centro de Dembele desde la izquierda, se adelantó a Sergio Ramos y comenzó a decantar el partido, según consignó un despacho de la agencia española EFE.

Quiso reaccionar Real Madrid, pero Ter Stegen siguió con brillantes atajadas y la respuesta de Barcelona fue contundente.

De inmediato, en cuatro minutos, cerró el compromiso con el autogol de Varane tras otro envío de Dembele, esta vez desde la derecha, y un penal de Casemiro a Luis Suárez. Messi, que vivió un clásico tranquilo, le cedió el honor al uruguayo de terminar con un doblete para sellar una nueva presencia en una final de Copa.

Será la sexta consecutiva para el Barcelona. Algo histórico. Buscará su quinto título en fila ante el ganador del encuentro entre el Valencia y Real Betis, que se medirán mañana en Mestalla, tras la igualdad 2 a 2 en el Benito Villamarín de Sevilla.  

 

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