DATA

VERSIONES

Aerolíneas Argentinas, ¿en riesgo de default?

Desde hace días se viene hablando de que Aerolíneas Argentinas atraviesa una grave situación deficitaria, agravada ahora por importantes vencimientos de deuda por los aviones Embraer comprados a Brasil en 2012. Las versiones indican que la compañía aérea de bandera estatal busca US$150 millones en el sector privado para enfrentar los pagos de US$80 millones con el Banco de Desarrollo Económico y Social (BNDES). Incluso se comenta que Mauricio Macri analiza firmar un DNU para permitir que el Banco Nación salga al rescate de la compañía aérea estatal y evitar que entre en default.

En los últimos días surgieron versiones acerca de una grave situación deficitaria de Aerolíneas Argentinas. Y se comenta que Mauricio Macri evalúa firmar un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para permitir que el Banco Nación salga al rescate de la compañía aérea estatal y evitar que entre en default.

En el último balance que presentó AA registró una pérdida neta de $21.800 millones, lo que representa un incremento de $15.400 millones respecto de las pérdidas del balance anterior ajustadas por inflación para el período de 2017, que fueron de $6.700 millones. Asimismo, según publicó el Cronista, para este año incrementó su subsidio y terminará en US$200 millones.

El grupo aéreo de bandera nacional tiene buena parte de sus ingresos en pesos y gran parte de sus costos en dólares, por lo que quedó atrapado en la devaluación y la suba del precio del petróleo, lo que hizo que acelerara el proceso de búsqueda de un crédito en el sector privado.

Pero, fundamentalmente, la situación crítica surge de los importantes  vencimientos de deuda por los aviones Embraer comprados a Brasil en 2012. En ese momento, el Banco de Desarrollo Económico y Social (BNDES) del país vecino otorgó un préstamo de US$700 millones.

Es por eso que, según El Cronista, Aerolínas busca US$150 millones en el sector privado para enfrentar los pagos de US$80 millones con el Banco Nacional de Desenvolvimiento Económico y Social (BNDES) y así estirar los plazos.

 "Me llegó info de una deuda muy importante de Aerolíneas Argentinas. No tengo números confirmados, pero son muy importantes", había dicho días atrás Luciana Salazar, la vedette que viene tirando bombas políticas que se han cumplido, como ser el resultado de las PASO, la implementación del "cepo cheto" (como ella lo llamó) y que el FMI no adelantaría los fondos hasta después del 10 de diciembre.

"La empresa está buscando como refinanciar estos vencimientos. En este momento, por la coyuntura económica, es difícil que Aerolíneas pueda conseguir una línea de crédito externa", informaron a La Política Online desde la compañía, donde no confirmaron que este préstamo se concrete con el Banco Nación, pero dijeron que es algo "que se está analizando". 

"Prestarle a Aerolíneas puede leerse como prestar a un potencial incobrable, ningún banco privado local o extranjero le conseguiría fondeo fácil. El acuerdo con el FMI no dice nada sobre préstamos del Banco Nación, pero exige presentar este mes un plan para reducir el apalancamiento, capitalizarlo con fondos frescos, mejorar los ratios de liquidez y solvencia, reducir las transferencias al Tesoro y reducir la morosidad e incobrabilidad", subrayó el economista y profesor de la USAL, Héctor Rubini, según publicó LPO, medio que lanzó la versión acerca del posible DNU de Macri para restacar a la compañía.

Cabe destacar que en julio pasado, AA tuvo el récord de 912.000 pasajeros transportados. "Acabamos de hacer un relevamiento estadístico que para nuestra sorpresa, muestra que la mayor cantidad de pasajeros las mueve el avión y no el bus como se creería. En este contexto es inexplicable que Aerolíneas tenga pérdida", subrayó Fernando Delfín Iglesias, especialista en economía del transporte.

Según Iglesias, este cuadro se genera por dejarle a la aerolínea de bandera la exclusividad de operación en las rutas menos rentables, cuando en aquellas que podría tener una mayor ganancia le "imponen" a las low cost y a Latam.

"Estas maniobras poco claras fueron el disparador de la renuncia de Isela Costantini, una de las mejores funcionarias que tuvo este gobierno, y que fue la primera en alcanzar metas de eficiencia. Ella logró un equilibrio operativo entre las rutas rentables de las no rentables, pero Dietrich le impuso un modelo de low cost y por eso se fue", explicó Iglesias.

De acuerdo a Iglesias, Aerolíneas debería mantener la operación de las rutas que dan pérdida por su carácter de "línea de bandera que debe tener un enfoque distinto a una empresa aerocomercial privada". No obstante, a mediano plazo propone que estos destinos sean cubiertos por el ferrocarril, que no sólo le cuesta menos al Estado, sino que "permite masividad a bajísimo costo para los pasajeros".

Dejá tu comentario